Una mañana de verano
Publicado por Unknown , viernes, 12 de octubre de 2012 0:21
Era verano y la cortina de la
ventana de mi habitación estaba medio echada, por lo tanto entraban los rayos
del sol, cosa que me dio directamente en la cara y me despertó. Me desperecé,
me asomé por la ventana y vi el día tan bueno que hacía, entonces decidí irme a
pasear a la playa.
Me vestí, bajé las escaleras, me
tomé un buen desayuno y cogí una toalla por si se me apetecía sentarme un rato
en la orilla. Cuando llegué a la playa empecé a caminar mientras el agua rompía
en mis pies, iba andando mientras escuchaba música e iba sumida en mis propios
pensamientos. Era aún temprano para que la playa estuviera llena, solo se veía
a algunas personas que habían madrugado para andar tranquilamente por allí.
Luego de andar los kilómetros
diarios, eché la toalla en el suelo y me tendí. Seguía pensando en todos los
problemas que acarreaba mientras tenía los ojos cerrados y seguía escuchando
música. Pasado un rato decidí sentarme por temor a quedarme dormida, me incorporé
y me quedé mirando el horizonte sin decir nada.
Cerca mía había un palo, alargué
la mano para agarrarlo y cuando lo hice me levanté y me acerqué a la orilla.
Empecé a hacer dibujos deformes, a escribir los nombres de mis amigos y a hacer
siluetas. Al rato volví a mirar y el agua ya se había llevado todo lo que había
escrito. Entonces un pensamiento se me vino a la cabeza:
Publicar un comentario